Argentina convenció, Sudcorea dijo presente

Me acomodé frente al televisor y disfruté por partida doble con los resultados del Grupo B, en la segunda jornada competitiva de la XIX Copa Mundial de Sudáfrica. Primero, con la victoria de Sudcorea sobre Grecia (2-0) y tres horas más tarde con el triunfo de la Argentina sobre Nigeria (1-0), en el que la selección dirigida por Diego Armando Maradona definió y convenció con su juego.
Pero vayamos por parte. Los asiáticos volvieron a destrozar el poco halo de maravillas que le quedaba a unos griegos, que desde su sorpresa con el cetro de la Eurocopa 2004, no han enseñado un fútbol merecedor de una victoria. Y eso lo aprovecharon sobremanera los sudcoreanos, expertos en contragolpes y con un mejor juego aéreo al exhibido en otras ocasiones.
Fue precisamente de cabeza que Lee Jung-Soo le anotó el primero de los dos goles a los helvéticos en los minutos iniciales del encuentro, mientras que el segundo llegaría en el tiempo complementario, cuando la gran estrella de esa formación, Park Ji-Sung, demostró en preciosa jugada individual que el fútbol se gana también con inteligencia y ganas de jugar, no con apatía y poco acometividad en la cancha, como dejaron los griegos.

Muy bien por la Argentina de Maradona y Messi
Las cámaras no dejaron de seguirlos ni un minuto: Maradona , Messi…; Messi, Maradona, como si de antemano supieran el destino del encuentro frente a una Nigeria muy diferente en cuanto al físico y la técnica que hemos visto desde 1994. Y por tercera ocasión salieron derrotados en un enfrentamiento mundialista con la formación albiceleste.
Si bien el único gol llegó en una jugada preparada en laboratorio: cobro de tiro de esquina de Juan Sebastián Verón y cabezazo de Gabriel Heinze, lo mejor estuvo en las innumerables oportunidades creadas de gol (4 de ellas de Messi), que si no llegaron a concretarse fue por los reflejos expectantes del portero nigeriano Enyeama.
Al término del partido, Maradona, feliz con su estreno mundialista como técnico, —por cierto se despidió como jugador en un recordado pleito frente a Nigeria en el Mundial de 1994— declaró a los medios de prensa acreditados: "ganamos un gran partido y estamos en el buen camino. Ojalá que los muchachos logren meter todo el cariño de la gente de Argentina y la que hoy estuvo en el estadio para que sea bueno para ellos, rindiendo cada vez mejor".
Sobre la inevitable relación de las dos M en la selección argentina, el Pibe de Oro precisó: “A Leo lo quiero cerca de la pelota, y hoy estuvo. Mientras él se divierta cerca de la pelota, mejor para todos. Quitarle la pelota a Leo sería como quitarle el chocolate a un pibe. No sería lindo el fútbol sin ver a Messi que toque la pelota, hoy hizo cosas bárbaras.”
Con estos resultados, Argentina y Sudcorea comandan ahora el primer lugar del grupo y se verán frente a frente el próximo 17 de junio, en tanto los perdedores intentarán luchar a muerte por una victoria esa propia fecha, sobre todo los africanos, en busca de no salir todavía del juego por el avance a octavos de finales.