La visita a la Clínica Neurológica del CIREN (Centro Internacional de Restauración Neurológica) fue a media mañana. Una sola intención animaba nos animaba: apreciar cómo va la recuperación del mejor ciclista cubano de la última década: Pedro Pablo Pérez.
Bastarían los primeros intercambios con su hermana Mirta Esthers, el equipo multidisciplinario que lo atiende —encabezado por el doctor Amado Díaz de la Fe— , y sobre todo una pequeña entrevista con el pedalista, para notar que su evolución es muy favorable luego de poco más de dos meses del accidente automovilístico que sufrió.
“Agradezco la preocupación de todo el pueblo por mi estado de salud, y en especial de las altas autoridades del país. Estoy mejorando por día y ahora los médicos y los fisiatras están haciendo hincapié en los ejercicios de rehabilitación del tren inferior, para poder caminar bien. Los ejercicios son fáciles en comparación con los de mi preparación deportiva”, comentó Pedro al concluir su sesión de entrenamiento.
“Ya estoy subiendo escaleras con ayuda del fisioterapeuta.
Duermo con este collarín fijo, el cual solo me quito para bañarme. Le digo a la gente que está preguntando que confíen en mí y en estos médicos, que solo pienso en salir adelante. Muchos dicen que no montaré bicicleta y yo les digo que esperen. La mejor forma de demostrar es haciendo. Quiero volver a montar bicicleta, no sé si para dar la Vuelta a Cuba, pero montar…”, señaló el deportista pinareño.
“La medalla de Yoanka la disfruté en cama. Mientras la veía por la televisión decía: que haga esto, ahora tal cosa… Fue muy bonito y luego escucharla me emocionó. Eran sus últimos Juegos Olímpicos y si ella pudo y me dio fuerzas, yo también podré salir recuperado. Su apoyo ha sido incondicional”, comentó.
Finalmente, Pedro Pablo narró las visitas recibidas, entre ellas de sus compañeros de equipo antes de salir a la Vuelta a México, de sus entrenadores y federativos, de los amigos más fieles. Un mensaje de agradecimiento cerró este corto, pero imprescindible reportaje.
“Agradezco al doctor Amado, a las enfermeras, al personal de terapia, a los doctores en Pinar del Río, Iván Arenas y Moisés, y a todo el personal del CIREN que me han tratado con el cariño y la bondad que no podré olvidar jamás. Pondré todo mi empeño para salir lo más rápido. Si el pueblo está conmigo, como todos me dicen, no puedo defraudarlo. Cuenten con Pedro Pablo siempre. No les voy a fallar.”
Y ahora disfrute usted las imágenes, esas que nuevamente valen más que mil palabras.
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