Cumplieron judocas: campeones y hacia Beijing

El judo cubano acaba de protagonizar una actuación de las más sobresalientes en los últimos años: ganar el campeonato panamericano; obtener todos los boletos olímpicos y hacerlo en una ciudad y ambiente tan hostil —sobre todo políticamente— como Miami, Estados Unidos.
La segunda jornada del certamen continental dejó una cosecha de tres doradas para nuestra comitiva, con lo cual se ratificó en la punta de América como país, en tanto la selección femenina ratificó su cetro y cargó además el trofeo de mejor ippón para Yanet Bermoy (48 kg), subcampeona del mundo del 2007.
Precisamente Yanet aportó el único título de la tropa que dirige Ronaldo Veitía, y según el reporte de varias agencias de prensa, su proyección sobre la brasileña Daniela Polzin en el centro James L. Knight —sede del certamen— provocó exclamaciones de espectacular en más de un asistente.
La titular mundial del 2001 y bronce olímpica de Atenas 2004, Yurisleidys Lupetey (57 kg), no pudo en semifinales con la estadounidense Valerie Gotay, a la postre titular y seleccionada la mejor judoca del torneo. No obstante, la holguinera sumó 7 puntos al ranking continental y aseguró su boleto olímpico, pues le queda aún el torneo zonal y aparece en tercer lugar de la lista sin opciones de ser desplazada por su rival más cercana.
Una que no estuvo bien fue Yagnelis Mestre (52 kg), quinta en su categoría, pero asegurada con esa actuación para la cita cuatrienal de China, pues Cuba —se clasifica la división, no el nombre— estaba en la vanguardia de ese peso. Sólo una acotación con respecto a los pasaportes olímpicos. La selección femenina aseguró a todas sus representantes, aunque matemáticamente Yalennis Castillo (70 kg) tendrá que al menos quedar en quinto lugar para ratificar su boleto, dado que su más cercana rival tiene aún opciones.

MUY BIEN POR BRAISON

El supercompleto de la selección masculina, Oscar Braison (libre) tomó sobrado desquite por ippón ante el brasileño Walter Santos —lo había derrotado en la discusión del título en +78 kg— y no sólo dio al equipo varonil el segundo oro de la fecha conclusiva, sino que definió el primer lugar para Cuba en el torneo general.
Yordanis Arencibia (66 kg) había impuesto el mejor ritmo de los judocas de la Isla en esa propia jornada, con el título de su peso, al vencer por ippón al fogoso ecuatoriano Roberto ibáñez. Arencibia había declarado a su llegada a Miami que confiaba en su triunfo, tercero consecutivo en lides panamericanas.
Importantes faenas cumplieron también Yasmani Piker (60 kg) y Ronald Girones (73 kg), quienes con sus medallas de bronce se incluyeron entre los seis primeros de sus divisiones en el ranking de América, único requisito para asistir a Beijing.Cuba finalizó en la tabla general con seis medallas de oro, dos de plata y seis de bronce, por delante de Brasil —sí ganó el evento masculino— con cinco doradas, seis plateadas y dos bronceadas. Venezuela sorpresivamente se coló en el tercer lugar (2-2-3), desplazando a los anfitriones al cuarto escalón (2-1-0)