Ciego de Ávila, el más ganador de la pelota cubana

El equipo de Ciego de Ávila conquistó su victoria número 12 y se convirtió en el más ganador de la 50 serie nacional de béisbol, en una jornada donde se repitieron los mismos triunfadores de la fecha precedente, lo cual hace presumir varias barridas dominicales.


La tropa que dirige Roger Machado sigue comandando la punta de la zona oriental, tras el éxito 8-3 sobre sus comprovincianos de Camagüey, gracias a la tercera victoria de Dachel Duquesne, quien promete aportar mucho más esta temporada a los conocidos “Tigres” de la pelota cubana.
Otro conjunto que continúa bateando a sus anchas es Granma, superior por nocao 12-2 sobre Santiago de Cuba, que al parecer no encuentra todavía la senda victoriosa, pues su pitcheo de segunda línea anda de mal en peor. Este sábado 8 de las 12 carreras se la fabricaron entre el sexto y octavo episodio, cuando el manager Antonio Pacheco puso a casi todos sus relevistas.
La mejor carta de triunfo villaclareña, Freddy Asiel Álvarez, guió la sonrisa número once de los subcampeones nacionales, al disponer 10-4 de Las Tunas, en lo que mucho tuvieron que ver también los tres errores de la defensa tunera en los primeros capítulos, cuando la tropa de Eduardo Martín marcó ocho carreras decisivas.
En el occidente, Industriales se apoyó en par de cuadrangulares de Alexander Malleta —líder con 9— para dominar 6-2 a Cienfuegos. Frank Monthiet enseñó un dominio total de las bolas de rompimiento y solo se equivocó par de veces con el inicialista sureño José Dariel Abreú, quien impulsó las dos de su elenco con hit y jonrón, su octavo de la serie, para seguir detrás de Malleta.
Pinar del Río le ha tomado el gusto a las victorias y lleva seis seguidas, ahora frente a Isla de la Juventud 7-3, en la que el receptor Yosvany Peraza despachó dos vuelacercas y Donal Duarte lo acompañó con igual conexión, en tanto Reinier Verano se anotó la victoria desde la lomita.
Y ya que hablamos de lomitas, La Habana como anfitrión, colocó en ella a Miguel Alfredo González —quizás el más efectivo abridor de Cuba hoy—, que blanqueó al débil Metropolitanos 9-0, con apenas cinco imparables permitidos y respaldo ofensivo de 13 hits.
Finalmente, Sancti Spíritus no pudo doblegar a Matanzas, a pesar de los cinco jonrones y 20 indiscutibles de su poderosa artillería. Los llamados “Cocodrilos” dejaron al campo 13-12 a las huestes de Lourdes Gourriel, hundidas en una mala racha de seis fracasos en línea, algo impensable para muchos tras un arranque de ensueño.