12 septiembre, 2011

51 serie nacional de béisbol: entre querer y tener


Las primeras noticias sobre la 51 Serie Nacional de Béisbol se completaron esta semana con la confirmación de 17 equipos para la venidera temporada, un calendario más reposado al jugar tres días y descansar uno, así como la definición de los directores de Metropolitanos e Industriales, Luis Suárez y Lázaro Vargas, respectivamente.
Quizás muchos pensaron que con la entrada de las formaciones de Artemisa y Mayabeque sería el momento ideal para pensar en un ajuste total a la estructura de un certamen, que en los últimos años ha privilegiado el principio de territorialidad —justo y por demás muy seguido por los aficionados— por encima de la calidad real que necesita nuestro béisbol.

Por eso sostengo que Metropolitanos debió quedar fuera del ya abultado esquema de 16 formaciones en dos zonas geográficas, porque sus resultados deportivos en la última década no ilustran un rendimiento acorde al nivel que aspiramos. El socorrido argumento de establecer una proporción entre cantidad de habitantes de la capital y mayor número de peloteros es cada vez menos serio.
¿Qué reglamento deportivo establece el derecho de representatividad por población y no por territorios o países en el caso de la arena internacional? ¿La verdadera función de Metropolitanos desde hace algunos años es salir a ganar un cetro o simplemente foguear prospectos que aspiran a ingresar un día en Industriales? ¿Es injusto o no con otras provincias que tienen que formar a su relevo desde un solo equipo en la propia serie nacional?
Sin embargo, el tema trasciende los argumentos socio-políticos que la Federación Cubana validó para incluir a los “rojos” de la capital en la próxima Serie. Quizás si a esa decisión le hubiera acompañado un cambio de estructura, enfocada no en eliminar conjuntos, sino en ir depurando calidad a medida que avanza el campeonato, menos voces se levantarían inconformes en todo el país con incluir al segundo elenco de La Habana.
Desde la pasada campaña, sobre el tapete hay decenas de propuestas de cambios, algunas mejor pensadas que otras, y en las que el componente económico tampoco se descarta, pues jugar pelota durante seis meses cuesta. Y que nadie lo dude. Algunas llegaron a nuestra redacción y las comentaremos pronto.
Sobre la reprogramación de tres partidos y luego uno de descanso, recomendamos que una zona comience a jugar un día después de la otra luego de la inauguración el 27 de noviembre entre Pinar del Río y Ciego de Ávila. Así se garantizarían juegos todos los días, sin afectación para el equipo que le toque descansar sábado o domingo y por compromiso televisivo tenga entonces que salir al terreno.
Finalmente la designación de Luis Suárez y Lázaro Vargas despejó un misterio, sobre todo para los seguidores de la franela azul. En sus primeras declaraciones, el otrora antesalista fue preciso: “El objetivo es que Industriales sea combativo, jueguen bien a la pelota y brinden un espectáculo como el pueblo se merece. Si hacemos eso lo otro llegará”.
Eso lo quieren todos los mánagers. El reto está en traducirlo en hechos concretos.

1 comentario:

Jorge Luis dijo...

Hasta cuando los privilegios de Industriales con su "sucursal" jugando en la serie nacional? es que acaso china tendría derecho de llevar 2 equipos en todos los deportes a las olimpiadas? se han ganado los Metros, y digo más, la combinación Industriales+Metros ese derecho? por favor, sumemos los juegos ganados por los 2 en las últimas series y veremos lo injusto de esta decisión.
creo que debería llevarse a cabo una encuesta nacional y ver que cree la población de todo el país de esta decisión.
y que conste, yo soy capitalino.